POLÍTICA
Andrés “Cuervo” Larroque: “Si Argentina no encara un debate serio vamos a seguir como hasta ahora o peor”
El ministro de Desarrollo de la Comunidad de la provincia de Buenos Aires y referente de La Cámpora, Andrés “Cuervo” Larroque, calificó como “grave” la situación económica y social que atraviesa el Conurbano bonaerense: “No da más y solo le damos aspirinas y ponemos curitas”, aseguró.
En un reportaje concedido a Letra P, el funcionario de Kicillof recordó que “el Estado bonaerense hace el esfuerzo, pero las políticas macroeconómicas las define el Gobierno nacional”, y que eso “condiciona mucho la situación” en esa zona de la Provincia.
“Si Argentina no encara de conjunto un debate serio sobre cómo resolver la situación social del conurbano vamos a seguir como hasta ahora o peor. Hoy no hay una política estable y formal que pueda resolver esta situación estructural del conurbano”, afirmó.
En este sentido, Larroque reiteró que la política social más eficiente se debería hacer desde el Ministerio de Economía nacional y que la discontinuidad del IFE agravó la situación. “Nosotros damos aspirinas y ponemos curitas. Son paliativos. Necesitamos que el cirujano opere con celeridad”, apuntó el ministro en sus declaraciones publicadas este jueves, aunque fueron realizadas días antes de la renuncia del ex ministro de Economía, Martín Guzmán.
Los planes sociales y una sugestiva frase sobre el ministro de Desarrollo
Consultado sobre la cantidad de planes sociales que el gobierno nacional distribuye en Buenos Aires, Larroque afirmó: “El verdadero ministro de Desarrollo Social es Emilio Pérsico. (Daniel) Arroyo se fue por eso, porque el que lo maneja es Pérsico, que habla directamente con el Presidente”.
Para el funcionario camporista, existe una clara discrecionalidad en la administración de esa asistencia social por parte de las organizaciones. “Es un problema gravísimo y ocurre porque el Movimiento Evita hizo un acuerdo con Macri apenas llegó a la presidencia: el Estado le entregaba la administración de los planes, de todo ese presupuesto, a cambio de una paz social”, señaló.
Y enfatizó: “El Estado tercerizó en las organizaciones sociales esa función. Que lo haga un gobierno liberal es lógico, pero no es lógico que lo haga un gobierno peronista. Muchas organizaciones sociales, con el Movimiento Evita a la cabeza, no registraron que ganamos las elecciones y que volvió a gobernar el peronismo, más allá de que el Presidente se autodefina hippie y socialdemócrata”.
“En su disputa histórica con Cristina, y en la ignorancia o mala fe de Alberto de dejarlos hacer, el Movimiento Evita encontró un mecanismo para intentar disputarle poder a Cristina, con quien tienen un problema de muchos años”, agregó el funcionario y voz directa del pensamiento de la Vicepresidenta.
Larroque está a favor de eliminar la intermediación de las organizaciones sociales en la entrega de planes y que vuelan a ser administrados por los estados provinciales o municipales como lo planteó CFK durante un acto en Avellaneda junto al secretario general de la CTA, Hugo Yasky, y el ministro Jorge Ferraresi. “Negar al Estado en esta discusión es una locura. Hay que salir de esta trampa. El Estado nunca puede perder la centralidad, como está ocurriendo ahora”, advirtió.
Asimismo, el ministro bonaerense reclamó el salario básico universal como salida, ante la ausencia de una política clara de ingreso para los sectores vulnerables. “En su momento, tuvimos la política revolucionaria de la Asignación Universal por Hijo (AUH). Hoy hay un nivel de crisis que requiere una política de ingresos que quizás deba ser transitoria pero que nos permita llegar a una recuperación del salario o a una recuperación del empleo como la que nosotros aspiramos”, afirmó.
“Necesitamos una política de ingresos como lo fue el IFE en su momento. El Potenciar Trabajo es una frazada corta o, si se quiere, un sofá cama, porque como política focalizada de generación de empleo está desnaturalizada y como política de ingreso es corta”, añadió.
Larroque recordó que se está trabajando tanto con el gobierno nacional como con senadores y diputados: “Es urgente. Lo lógico es que se resuelva en un mes, dos meses. Sale por decreto o por iniciativa parlamentaria”, concluyó.